En la parroquia de Borneiro, en el municipio gallego de Cabana de Bergantiños, se conserva la que se ha dado en denominar "la catedral del megalitismo en Galicia". Y es que... realmente, impresiona y sobrecoge el pensar en su construcción cuando no existían los medios con los que contamos ahora.
Este monumento funerario data del Neolítico (entre el años 3000 y el 2500 a.C.) y tras varias excavaciones y estudios, hoy en día disfrutamos de un completo plan para su total recuperación y conservación.
Para conocer los estudios más antiguos sobre Dombate hemos de remontarnos al historiador gallego Manuel Murguía (esposo de Rosalía de Castro) que, en 1865 realiza la primera descripción conocida del dolmen.
Las primeras excavaciones en Dombate se realizaron bajo la dirección de José María Bello, durante muchos años: director del Museo Arqueológico e Histórico de A Coruña(...) En dichas excavaciones, realizadas entre 1986 y 1989, los arqueólogos descubrieron una irregularidad en la forma del túmulo que deformaba el habitual perímetro circular de las mámoas. Se trataba de otro túmulo sepultado por el principal con un pequeño dolmen de cámara simple en su interior al que se accedía por un hueco con forma de funil en su parte superior.
Tras comprobarse que fue anterior al monumento visible, recibe la denominación de Dombate Antiguo, frente al de mayores dimensiones o Dombate Reciente.
Dombate Antiguo data de finales del V milenio y dejó de utilizarse con el levantamiento del nuevo dolmen. Dombate Reciente fue construido en torno al 3700 a.C. y se cerró como lugar de enterramiento en torno al 2700 a.C.
El dolmen Antiguo estaba compuesto por 9 ortóstatos que se identificaron gracias a las huellas descubiertas en el suelo. Y Reciente, en cambio, consta de 18 grandes ortóstatos: 8 en la cámara y 10 en el pasadizo. Entre los que destaca la losa de cabecera con 7,78 toneladas de peso.
Tras las excavaciones, se hizo evidente que era necesario conservar un monumento de la relevancia de Dombate y crear un proyecto de musealización integral con un edificio respetuoso tanto con el propio yacimiento arqueológico como con el entorno.
La responsabilidad de un proyecto tan complejo recayó finalmente en el arquitecto gallego Francisco José Vidal. para su realización, se fijó en las líneas básicas del plan director del Dolmen de Dombate, en el respeto por el monumento, en su sostenibilidad, conservación, reversibilidad de las intervenciones y en criterios de integración en el paisaje. Un proyecto muy personal en materiales nobles, pero con importantes cargas conceptuales y simbólicas.
El proyecto se consolidó con la realización de dos edificios independientes:
Un edificio puerta o centro de recepción de visitantes.
Y un pabellón a modo de vitrina que permite vislumbrar la silueta del monumento y conectar desde el interior con el paisaje rural circundante. En él se conjugan la arquitectura actual de vanguardia con elementos simbólicos relacionados con el propio dolmen.
Entramos en el primero de los edificios, el que ejerce de recepción y allí nos informaron de lo que íbamos a ver. También nos hablaron de las visitas guiadas y pensamos en que ojalá podamos volver para disfrutar de una de ellas. Grandes y completos paneles explicativos y todo lo que ha sido el proceso de recuperación y conservación.
Con ilusión recorrimos los mapas para descubrir todos los yacimientos. Para visitarlos desde allí y recordar juntos los que ya conocemos.
Son tan sorprendentes... En ellos hay una energía especial.
Y con un gran entusiasmo fuimos nombrando los que nos faltan por visitar, ojalá podamos completar ambos mapas.
El Astro Rey marcaba el ritmo de vida de las sociedades campesinas: los ciclos agrícolas, el crecimiento y desarrollo tanto del mundo animal como vegetal. Pero también era la representación del orden y la armonía del Cosmos.
La construcción y posición de los monumentos funerarios del occidente europeo no era en absoluto arbitraria. Las gentes del Neolítico, recogieron en ellos sus observaciones astronómicas. Los megalitos se convirtieron así en los primeros calendarios de la humanidad en que recogían los ciclos periódicos de determinados fenómenos celestes como lo demuestran recientes estudios arqueoastronómicos sobre los túmulos del oeste de Francia y la Península Ibérica, entre los que se encuentra Dombate.
La inmensa mayoría están orientados hacia el suroeste, hacia el ascenso o salida del sol durante el solsticio de invierno, momento que marcaba el nacimiento del nuevo año. La importancia que daban a este momento concreto del año, tendría con toda probabilidad, una estrecha relación con los acontecimientos sociales y rituales de la comunidad.
La técnica constructiva de los túmulos y dólmenes de Dombate fue habitual para este tipo de construcciones durante el Neolítico Atlántico Europeo.
Las comunidades campesinas de Borneiro aprovecharon el granito procedente de los yacimientos al aire libre, de las elevaciones próximas de rocas desde donde arrastraron los grandes bloques hasta su localización actual. Para el transporte utilizaron grandes troncos o rodetes por los que desplazaban los ortóstatos ayudándose de la fuerza humana y probablemente con bueyes.
Una vez en el lugar elegido, trazaban el eje sudeste-noroeste por el que construirían el dolmen, excavaban el suelo y aprovechaban la tierra extraída para formar un pequeño desnivel que facilitase el levantamiento y colocación de los ortóstatos por medio de cuerdas.
Primero situaban la de cabecera y después en ella las siguientes que afianzaban con tierra y piedras a modo de calzos.
Una vez colocados los ortóstatos verticales, llenaban de tierra el túmulo y aprovechaban la rampa para arrastrar las losas horizontales y cerrar la cubierta. En el caso de Dombate Antiguo, el túmulo alcanzaba la altura de la losa de cubierta. En Dombate Reciente, en cambio, sólo llegaba a la altura de la cubierta del pasadizo.
La belleza y simbolismo de sus pinturas y grabados no tienen parangón en esta zona. La existencia de otros dólmenes con restos de pinturas en su interior, aporta indicios para pensar que la mayoría habían sido profusamente decorados.
El interior de Dombate Reciente debió ser en su época un espectáculo impresionante. Gracias a los restos de pintura, sabemos que tanto paredes como suelos, recibieron una imprimación de caolín procedente de un yacimiento cercano que lo convirtió en un gran lienzo blanco. Sobre él pintaron figuras geométricas, líneas rectas y ondulantes, puntos y rombos formando mallas.
Los colores empleados fueron: el rojo, realizado con arcilla rica en óxidos de hierro y el negro, procedente de carbón vegetal. Comco aglutinante emplearon grasa de origen animal, probablemente de origen lácteo. Para aplicar el revoco de caolín se emplearon las manos. Los puntos de realizaron presionando con palos circulares manchados de pigmentos sobre la argamasa todavía fresca y el resto, mediante pinceles realizados con pelos de animales de los cuales todavía se conservan sus huellas en las pinturas.
Bajo las pinturas se conservan también los restos de grabados que reflejan líneas ondulantes y un objeto desconocido denominado por los especialistas: "the thing" (la cosa), pero como sucede con las pinturas, su significado es todavía un misterio.
Tras la exposición en el "edificio puerta", salimos al exterior y dentro de este inmenso recinto, nos encaminamos hacia el segundo de los edificios. En la imagen sobre estas líneas es fácil ver la distancia entre ambos (el que se ve al fondo será la recepción) y en esta de la izquierda, ya se vislumbra la cubierta.
¡Que emoción y cuántas ganas de entrar en ella!
La cubierta es una gran malla cuadrangular que semeja las pinturas conservadas en el interior de Dombate Reciente. Sus cuatro aguas confluyen en una linterna central que ilumina suavemente el dolmen y lo envuelve en un halo que refuerza el sentido sagrado del monumento.
La pasarela de madera que lo circunvala permite observarlo desde todos los ángulos.
Estábamos solos y era increíble el silencio y la quietud del lugar.
La luz entraba por las paredes de cristal y creaba una atmósfera especial. Los paneles que se ven a la izquierda de esta imagen sobre estas lineas me ayudaron a recopilar toda la información que aparece escrita en color granate.
Había tanta paz...
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Recomiendo consultar los horarios para las visitas guiadas.
Por lo que pudimos ver, durante los meses de verano los sábados hay también visitas teatralizadas. Todavía quedan dos sábados antes de que termine agosto... quizá puedas disfrutarlas.
Agradeciendo que hayas llegado hasta aquí, deseo fuese entretenida la publicación.
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Visita e imágenes tomadas el 25 de junio de 2021
Muy interesante artículo sobre Dombate. El megalitismo gallego es fascinante.