El día 15 hará tres años que visitamos EL ROCÍO y todavía siento su imagen blanca bajo un cielo azul intenso, el silencio y recogimiento, la devoción, las velas encendidas y el polvo en los pies.
Según cuenta la leyenda, en el siglo XV, un cazador sevillano que se encontraba en la Villa de Almonte, en el lugar llamado La Rocina, vio que sus perros no paraban de ladrar; estaba de caza y fue entonces que al acercarse, encontró la imagen de la Virgen en un árbol. Fue así como se la conoció en un primer momento: "Santa María de Las Rocinas".
En Almonte, provincia de Huelva, se encuentra la aldea que lleva por nombre EL ROCÍO y en ella: la famosa y venerada ermita a la que acuden miles de devotos, especialmente el día en que se celebra su romería (el fin de semana del Lunes de Pentecostés).
Tras recorrer a pie, a caballo, en carretas o en carros engalanados el camino que atraviesa el parque nacional de Doñana, los devotos llegan a las puertas de la ermita, donde los almonteños la noche del domingo al lunes de Pentecostés, realizan lo que popularmente llaman «el salto de la reja». A continuación, sacan a la Virgen que llaman «Blanca Paloma» en procesión y la llevan a hombros por la aldea. El trayecto recorre las distintas hermandades desde donde los sacerdotes y todo el pueblo rociero rezan La Salve.
Tras el recorrido, la hermandad matriz de Almonte, entra en la ermita y debe llegar al presbiterio, siendo en ese instante cuando se produce el salto de la reja. La Virgen se encuentra en unas parihuelas en el presbiterio.
Actualmente hay más de 125 hermandades. Sus orígenes se remontan al año 1653 en que se proclama a la Virgen patrona de la villa de Almonte y a partir de entonces comienza a difundirse el nombre de Virgen del Rocío en detrimento del anterior de Santa María de las Rocinas. La más antigua de las hermandades es la del Rocío, fundada en el año 1677.
Estas imágenes son de EL REAL, nombre que se conserva desde los orígenes y hace referencia a este núcleo urbano, concretamente "REAL DEL ROCÍO". Espacio en forma de plaza ubicado en la parte izquierda de la Ermita y delimitado por la misma y por las casas de la Hermandad Matriz de Almonte y las de las Filiales más antiguas.
¡Cuánto me gustaría participar en la romería! Sentir el fervor de la fe y vivir allí la manifestación alegre y folclórica tan especial en el sur de España.
Despido esta publicación con un pequeño vídeo en el que las imágenes son acompañadas del bonito poema de Manuel Machado: "¡Viva la Virgen del Rocío!"
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